“Una vida robada” tiene como telón de fondo la trama real de los bebés robados que sucedió en España entre los años 60 y 90. Utilizando al personaje de Luz como elemento edípico, que busca una verdad cuya revelación será difícil de asimilar, “Una vida robada” explora el tema de la propia identidad, habiendo sido esta violentamente sustraída. ¿Hasta qué punto podríamos bucear en nuestro árbol genealógico sin sufrir un shock? ¿De verdad queremos saber de dónde venimos? ¿Cuál es el precio que paga una persona por saber quién es? ¿Es cierto el dicho que la verdad te lleva a todas partes menos donde tú quieres? ¿Es necesario cerrar las heridas del pasado para poder vivir el presente? “Una vida robada” es un espectáculo heredero de obras como “El Pato Salvaje” de Ibsen, “Edipo Rey” de Sófocles o “Incendies” de Wajdi Mouawad. “Una vida robada” plantea cómo la verdad “de los demás” es irreconciliable con la verdad “individual”.